Por Jorge Campos, consultor de Negocios de Arcadis Chile
Los depósitos de relaves y otros residuos mineros constituyen importantes desafíos de sustentabilidad para los proyectos mineros en el mundo. Así como es relevante el cierre de los activos mineros tras el cese definitivo de sus operaciones, el correcto tratamiento de los depósitos de relaves es clave para el bienestar de las comunidades.
Desde 2018, el ministerio de Minería ha venido desarrollando una política específica de relaves, con el objetivo de fomentar una minería segura y sustentable. Por eso, en Arcadis hemos formado un equipo al servicio de proyectos locales que acompaña a los clientes por más de 20 años, durante el ciclo de vida minero completo. Ayudamos a estudiar, diseñar e implementar el cierre de faenas mineras, considerando siempre a las comunidades.
Como empresa reconocemos, evaluamos y mitigamos los riesgos para asegurar la permanencia de los depósitos de relaves en forma sostenible y, en este sentido, para Latinoamérica vienen grandes desafíos de cara al cierre de miles de depósitos de relaves en las próximas décadas. De ahí que estemos trabajando tanto con la industria, como con los órganos reguladores de la minería.
En Chile, desde hace más de una década colaboramos con los ministerios de Minería y de Medioambiente en diversos instrumentos y guías desarrollados para la sustentabilidad de la industria minera y el ciclo de vida de los depósitos de relaves en particular. En este sentido, podemos destacar el aporte de nuestros equipos técnicos a la definición de los estándares nacionales de estabilidad física y química de estos depósitos y el desarrollo de metodologías de evaluación de riesgos para el cierre de estas instalaciones.
Además, hemos participado en los comités técnicos para la actualización de los reglamentos del diseño, construcción, operación y cierre de relaves, convocados por el ministerio de Minería y el Sernageomin. Esta larga relación con los órganos reguladores en Chile nos permite estar a vanguardia de la normativa y aportar con las mejores prácticas, cómo lo exige el país líder de la minería.
